Punto final. Hasta aquí hemos llegado. Soy persona de palabra. Prometí un plan para ganar tiempo. Prometí financiación para el plan. He cumplido. El plan lo puede coger quien quiera. Puede modificarlo a su antojo. Pero sé que el plan funciona. Es así de simple. Y sé por qué funciona. Pero explicar ese convencimiento y esa seguridad es un tema personal. Los pocos que me conocen de verdad saben por qué lo digo. No veo necesario explicarlo públicamente. Además, sé por experiencia cuál es la reacción del 95% de las personas cuando se les plantea una situación similar a la mía: A MÍ NO ME PARECE. Así que, como es casi seguro que a ti tampoco te lo parezca, no vamos a perder el tiempo en recorrer un camino que yo, al menos, ya sé dónde acaba. Es cuestión de fe. o te lo crees o no te lo crees.
Es como cuando empecé con el plan. No sabía que esta parte iba a coincidir en el tiempo con la celebración de la semana grande de los bolos. O sí lo sabía, pero al menos no de manera consciente. No es la primera vez que me ocurre algo similar, pero si es la primera que me doy cuenta y entiendo los motivos. Y, por esos mismos motivos, sé que esto funciona y que aún no es demasiado tarde. Y así, aunque parezca casualidad y no lo sea, al menos de manera intencionada y consciente, llegamos a esta parte del plan coincidiendo con la Semana Bolística.
Una gran idea de Segundo Eguía. Reunir a los mejores jugadores del panorama nacional ,aprovechando el mes de agosto. Pero, como tantas otras cosas, se nos ha ido de las manos. La filosofía inicial de la semana bolística como fiesta de los bolos, como lugar de encuentro, como punto de reunión de todos los que defendían nuestro juego por toda España, se ha convertido en un negocio más. Hasta el límite de que fue una de las principales causas del cisma que aún colea en nuestros días. Solo los que lo vivimos en primera persona alcanzamos a intuir lo que ocurrió. Solo nosotros sabemos la importancia de organizar un evento de tales dimensiones. Nosotros y los heladeros por supuesto.
Le pese a quien le pese la semana bolística es un negocio. Y como todo negocio debería ser productivo. Seguro que no has echado un vistazo a los números de la semana Bolística. Lo sé, los números en los bolos son un coñazo, más allá de los 169 a bolos, pocas cifras tienen importancia. Pero ya sabes que yo soy el rarito. Al que le gustan los números porque transmiten la realidad mejor que cualquier percepción. Si haces el esfuerzo de mirar los números de la semana bolística, verás las dimensiones del negocio del que te hablo. Y ojo, igual hasta piensas que es necesario para los bolos montar un circo de esas dimensiones. Eso no lo cuestiono. Pero a todo negocio se le debe exigir un rendimiento. Y en el caso de la semana bolística, el rendimiento para los bolos es incluso negativo. Y digo que es negativo porque parte en dos la celebración de los campeonatos de España. Te roba dos semanas del mes de agosto. Entre otras cosas, empuja muchos campeonatos a fechas poco propicias.
Vamos con los números. Hasta el año pasado el Gobierno de Cantabria ponía 16.000 euros y el Ayuntamiento de turno 20.000 euros. Este año, espero que con un criterio diferente, el Ayuntamiento pone 25.000 euros. Pero hasta que no vea con mis propios ojos el destino de esos 5000 euros de más, no me fiaré de su efectividad. Gobierno y Ayuntamiento ponen 36.000 €. Ojo, que digan que los van a poner no quiere decir que los ingresen por adelantado. Quiere decir que, con mucha suerte, igual están pagados a final de año. 36.000 euros que en agosto no hemos ingresado y que hay que adelantar. Pongamos que se ingresan entre publicidad y taquilla otros 13.000 euros. Redondeando tendremos 49,000 € de ingresos. Desde una perspectiva empresarial creo que al menos un 10% debería quedarse en los bolos, o sea 4.900 euros. El problema es que el resultado final para los bolos es del 0%, es decir 0 euros. Rentable no parece.
Por suerte el criterio de Norberto es el de la transparencia. Ha arrojado un poco más de luz sobre las opacas y espesas cuentas de la Federación Cántabra de bolos. Ahora hay mucha más información. No como antes, que cuando yo afirmaba que las memorias eran deficitarias, alguno se quedaba con ganas de darme un par de guantazos. Pues se lo repito, señor, eran deficitarias. Y estaré encantado de demostrarlo con números. Aunque mucho me temo que, por mucho que ponga la realidad encima de la mesa, no la va a querer ver. Es una cuestión de fe y con la fe y las creencias no me apetece toparme.
Vamos como, he dicho, a celebrar que por primera vez en la historia de los bolos la luz aparece en las cuentas de la semana bolística. Vamos a ver el detalle de la semana bolística de 2022. Que está en las cuentas de la FCB, el que quiera que lo compruebe. A mí me gustaría más un detalle de ingresos y gastos por programas o proyectos. Así veríamos mucho mejor por donde se nos escapa el dinero y qué proyectos y programas están financiando a los que son deficitarios, como las memorias.
- Gastos totales de la semana bolística: 49.117 euros.
- Ingresos de la semana bolística:
- Gobierno de Cantabria dieciséis mil euros.
- Ayuntamiento veinte mil euros
- Taquillas y publicidad 13.700,93 €
- Total de ingresos: 49.700,93 €
Esto nos da un beneficio de 583.47 euros o, lo que es lo mismo, un margen sobre los ingresos de un 1,174%. A esto ya habría que restarle el IVA pero no nos vamos a poner tan técnicos. A mí, personalmente, poner 50.000 euros y obtener apenas 600 no me parece un negocio. Me parece aún menos negocio si tengo que adelantar el dinero y con ello retrasar otros pagos que considero más importantes: la ayuda a clubes, la ayuda a escuelas, el pago de los circuitos o la liquidación de los árbitros. Para mí, esos conceptos son más importantes. Habrá gente en el paraíso que no coincida conmigo. Lo respeto, pero no lo comparto. Es lo que tiene vivir fuera del paraíso, que ves las cosas de otra manera.
¿Son muchos cincuenta mil euros? Pues depende de con qué lo comparemos. Supone apenas un 10% del presupuesto federativo. Así que si lo comparamos con el presupuesto es poco. Pero el presupuesto federativo se gasta durante 365 días. Los 49.000 euros de la semana bolística se gastan en 12 días. Un poco más de 4000 euros cada día. Igual es demasiado ¿a ti qué te parece?
Si lo comparamos con la ayuda a las escuelas de bolos, que son 46.245,29 euros, pues entonces los 49,000 de la semana bolística si son mucho. Y eso teniendo en cuenta que con Norberto al frente del barco, ha subido bastante este concepto. Si echas un ojo al presupuesto de la anterior directiva para 2020, este concepto se fijaba en 31.000 €, porque así se hizo toda la vida (lo de que más es mejor aquí no se aplica, no conviene). Norberto lo ha aumentado un 49%. Números y datos reales. Yo creo que es más importante la labor que realizan las escuelas que cualquiera de los cientos de bolas que se lanzan en la semana Bolística. ¿A ti qué te parece.?
Si lo ponemos al lado de otra partida importante, como es la ayuda a clubes, que son 38.280.97 euros, los casi 50.000 euros gastados en 12 días me suenan a despilfarro absoluto ¿a ti qué te parece? Pero no lo digas por ahí, porque te dirán que te calles y que te pongas a cribar arena. Y, repito que soy un defensor de la justicia. Y, es justo reconocer que Norberto ha incrementado la ayuda a clubes desde que entró en un 27.60 %. Pero no es menos justo decir que, con ello y con todo, comparando ambas partidas con el presupuesto de la Semana bolística, que se ha incrementado un 6.77%, sigue siendo un despilfarro.
Podríamos seguir comparando datos. Pero me iba a enfadar porque no tolero las injusticias. Seguro que tú tampoco las toleras. Pero a mí me producen un enfado muy particular. Hasta el punto de afirmar lo que he dicho antes: cualquier escuela o cualquier Peña, con independencia de la categoría o la modalidad, tiene más importancia para nuestro futuro que cualquiera de las cientos de bolas que esta semana se están lanzando en la Santiago Galas.
Y esta salvajada de dinero ¿en qué se gasta? Solo los elegidos conocen la realidad. Transparencia sí, pero sin pasarnos, no nos vayamos a indigestar. Si quieres conocerlo tú también, solicitalo formalmente en la Federación. Yo sé que no lo vas a hacer. Y también sé que ellos saben que no lo vas a hacer. Porque si el desglose de esos 49.000 euros se pusiera en la revista de la semana bolística, igual había un escándalo el día de la final del campeonato de España. Por fortuna, repito, Norberto, con buen criterio, ha arrojado un poco de luz sobre el tema. Si echas un vistazo al dossier de la asamblea de este mismo año en su página 12 tienes bastante información.
En la semana Bolística todos sabemos que se disputan dos campeonatos de España. Dos campeonatos de España con dietas, el infantil no las tiene. Normalmente la retribución por disputar el campeonato para cualquier categoría y modalidad está establecida en 25 euros. Además, en los últimos años, dicen las malas lenguas, que ha habido campeonatos de España en los que no ha llegado el dinero para pagar esas dietas. Repito, eso dicen las malas lenguas. Dos campeonatos como los de la semana con 32 y 16 participantes supondrían en teoría 1.200 euros en dietas en condiciones normales. Los dos que se disputan en la docena bolística se multiplican por más de 5 y se van hasta los 8.280 euros. Si las cosas se hicieran de manera correcta dispondríamos de otros 7.080 euros. Que sumados a los 6.704 euros de partes anteriores hacen un total de 13.784 euros.
¿Y hasta los cuarenta y nueve mil euros que se gastan en la semana? ya te he dicho que solo lo saben los elegidos. Pero vamos a echarle imaginación y creatividad, que yo de eso tengo mucho. Vamos a imaginar en qué se van esos más de 40.000 euros que nos faltan. Repito que solo los elegidos tienen acceso a esas cifras, pero siguiendo las enseñanzas de don Gonzalo Fernández de Córdoba, inspirador principal de muchos de los presupuestos bolísticos actuales, resultará sencillo hacerse una idea:
- Ya hemos visto que en
picos, palas y azadones,perdón, en decidir dos campeones se nos van 8.280 euros. Esto lo pone en la página 12 del dossier de la asamblea de la Federación Cántabra de 2023. Es un dato real y público. - Otro dato real y público: los premios de la Copa Federación Española, en la misma página 12, que son 3200 euros. Llevamos ya 11.480 euros.
- Luego tenemos el torneo del millón, también en la misma página 12, cuyos premios, dietas o como queramos determinarlos, suman 7.640 euros. Hasta aquí 19.120 euros. A partir de este punto cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia….
- Todas las competiciones deben ser arbitradas, obviamente, pero nos encontramos con que no hay una tarifa estipulada. Lo que cobre cada árbitro dependerá del presupuesto de la semana y del número de árbitros. Esto nos dicen en la página 14 del dossier de la Asamblea. Se juegan un total de 76 concursos y siete partidos de la Copa Federación Española de bolos. Vamos a estimar así a ojo unos 1.500 euros de arbitraje. Unos míseros 150 euros si calculamos 10 árbitros. A mí no me parece excesivo, más bien lo contrario, pero como hay que exprimir al máximo el amor de la gente por los bolos, bien pueden ir por ahí los tiros. De momento iríamos por 20.620 euros.
- En esos setenta y seis concursos y siete partidos, podemos estimar, a ojo, que se derriben unos 12.000 bolos. Y esos bolos hay que armarlos. Y además hay que uniformar a esos pinches para un evento de estas dimensiones. Y para 12 días no les vas a dar una sola camiseta, eso sería demasiado cutre, que menos que tres. Y como son seres humanos, tienen que comer para mantenerse en pie. Que tú llegas a la bolera a ver la fase final del millón y estás allí viendo tres concursos. Pero esos pobres llevan allí desde las 9 de la mañana. Así que entre pinches, bocadillos y camisetas que menos que otros 3.000 euros. Ya nos ponemos en 23.620 euros.
- Esos doce mil bolos que se derriban hay que comprarlos. Dos boleras de la primera ronda del femenino y otras dos boleras de la primera ronda del infantil. Tres juegos para el millón (previa, semifinales y el nuevo de la final). Otros cinco para el Nacional de Primera. Dos más para la fase final del femenino y otros dos para la del infantil. Más un par de ellos para la Copa Federación Española hacen un total de 18 juegos de bolos. No sé lo que cuesta un juego de bolos pero así a ojo vamos a poner 130 euros. Son 2.340 euros en bolos. Además esos bolos luego sirven para ser repartidos a discreción por la organización entre sus admiradores. Hasta aquí 25.960 euros, ya tenemos más de la mitad.
- Nos hace falta personal que atienda la taquilla, ubique al público, controle las entradas (aunque este año es más fácil, hay menos público y menos puertas) pero esta no ha sido la tónica habitual. A este personal también hay que atenderlo y vestirlo, como hemos hecho con los pinches. Pero como no son protagonistas ni son irreemplazables y, además, disfrutan con lo que hacen, nos aprovechamos de ellos y les damos unas camisetas, unos bocadillos y una propinilla. Bastante que no los descontamos las camisetas y los bocatas. Y además, porque somos tan buenos y magnánimos, les dejamos entrar a la bolera gratis. Pongamos 12 personas y, como somos muy espléndidos, les vamos a dar 100 euros por tirarse allí 12 días. Son otros 1200 euros, ya llevamos 27.160 euros. Hasta 49.000 nos faltan 21.840 euros. Que siguiendo con la imaginación perfectamente se podrían desglosar de la siguiente manera:
- Presentación de la semana Bolística: 1200 euros
- Revista de la semana: 4000 euros
- Seguridad privada: 2.200 euros
- Ambulancia: 4.300 euros
- Cena de gala: 2.200 euros
- Para la peñas colaboradoras: 3.700 euros
- Trofeos: 1200 euros
- Muchos folios impresos con colorines para el público y la prensa con los resultados: 200 euros
- Pagar a la imprenta por la cartelería y las entradas: otros 200
- Detalles con los jugadores y jugadoras participantes: 240 €
- Página web: 500 euros
- Servicio de limpieza: 500 euros
- Materiales y otros gastos (cintas, clavos, banderas…): 1400 euros
Resumiendo y agrupando:
- Premios y dietas: 19.120 euros
- Parafernalia: 21.840 euros
- Currantes: 8040 €
Esto hace un total de cuarenta y nueve mil euros. Vamos a terminar, pero por favor, que nadie se quede mirando el dedo. No he dicho en ningún momento que los que reciben ese dinero no lo merezcan. Porque eso es subjetivo. Unos pensarán que si lo merecen y otros que no. Tampoco voy a juzgar si un participante en esos nacionales debe recibir 90 euros cada vez que saca las bolas de la bolsa. O si la peña campeona de la Copa Federación Española debe embolsarse 900 euros. Esos debates son en los que llevamos un cuarto de siglo perdidos. Y, mientras discutimos si son galgos o podencos, los que manejan el cotarro siguen a lo suyo. Así que aunque sé que es difícil resistirse, no mires al dedo, y mira, por un momento, este gráfico con forma de luna llena tricolor:
Porque esa luna llena tricolor que señalo, representa la realidad de nuestro juego. Y la realidad de nuestro juego es que los currantes que aman los bolos están infravalorados. Representan la porción más pequeña de esa luna. Lo más importante de nuestro juego, lo vital para su supervivencia (pinches, arbitros y currantes) los que nos regalan su vida y su tiempo, apenas reciben el 16% de los recursos. El 84% restante se reparte entre élites y parafernalia. Y eso no es justo ¿a ti te lo parece?.Ahora si: A MI NO ME PARECE. Por eso nos morimos. Porque somos capaces de tener a más de 30 personas durante 12 días por unos míseros 8.000 euros. Apenas 20 euros por persona y día. A una media de ocho horas, eso son 2,77 euros la hora. Y esa es la fotografía de esta gran familia bolística en la que unos manejan el cotarro y mantienen callados a las élites, mientras despilfarran 21,840 € en parafernalia y hacen felices a sus sirvientes por menos de tres euros la hora.
Y repito, no he dicho que ni un solo euro de esos 49.000 esté mal gastado. Si quieres organizar un evento como este tienes que poner la pasta. ¿Pero merece la pena? ¿que ganan los bolos con ello? nada. Ni un céntimo de esos 49.000 euros sirve para nada. Y esto nos lleva de vuelta a lo de siempre: más es mejor y así se hizo toda la vida. Y, colorín colorado, hasta aquí hemos llegado. Cuando vayáis esta semana a la Santiago Galas, comprad un helado por favor, que los heladeros también tienen derecho a vivir.